Deadpool y Lobezno no solo es
una bacanal de cameos, guiños autorreferenciales, acción ultraviolenta y groseros chascarrillos, podría ser también la fórmula muy astuta que ha buscado
Marvel Studios para
justificar y preparar el gran salto mortal argumental que supondrá su próximo gran evento cinematográfico,
Avengers: Secret Wars.