MADRID, 30 Abr. (CulturaOcio) -
El tercer episodio de la segunda temporada de The Last of Us ha incluido un detalle que, aunque podría parecer intrascendente, no ha pasado desapercibido para aquellos que conocen la trama del videojuego en el que se basa la ficción. Y es que Dina, acostumbrada al igual que sus compañeros a ver multitud de cadáveres durante años, en esta ocasión no ha podido evitar sentir náuseas. Algo que puede ser el indicador de un punto mucho más importante.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
Dina y Ellie emprenden juntas el camino en busca de Abby y su grupo para vengar la muerte de Joel. Durante su travesía, se topan con multitud de cadáveres de Serafitas, un colectivo cuyos miembros son reconocibles por las marcas que se hacen a ambos lados de sus rostros. Al ver tal cantidad de cadáveres, Dina no puede evitar vomitar y se excusa diciendo: "Esto nunca me ha pasado antes. Creo que ha sido por el olor". Ellie no parece extrañada y, acto seguido, retoman el camino hasta llegar a Seattle.
No obstante, teniendo en cuenta la historia de Dina en el videojuego original, que la serie haya mostrado al personaje de Isabela Merced vomitando no parece algo casual, pues lo mismo ocurre en el videojuego... antes de que tenga lugar una gran revelación: Dina está embarazada y Jesse es el padre del bebé. Si la ficción de HBO siguiera la cronología del juego, aún tendrían que pasar bastantes cosas antes de que Dina confesara su secreto.
En The Last of Us Parte II, Dina cuenta a Ellie que está embarazada ya en Seattle, cuando ambas se refugian en un cine abandonado para pasar la noche. Dina está muy cansada y se ve incapaz de emprender el camino, así que le pide a Ellie quedarse más tiempo descansando, pero finalmente acaba revelando el motivo real de su agotamiento extremo.
Además, hay otro detalle que Dina ha mencionado ya en este tercer capítulo. Y es que cuando ambas están en la tienda de campaña, Dina confiesa a Ellie que volvió a estar con Jesse después de que ellas dos se besaran en la fiesta de Año Nuevo. Esto sugiere que, incluso cuando ya no estaban juntos, siguieron manteniendo relaciones esporádicas, por lo que el embarazo de Dina no sería algo tan improbable.