MADRID, 6 Abr. (CulturaOcio) -
Ya está en los cines Oso vicioso (Cocaine Bear), cinta dirigida por Elizabeth Banks. La película narra la historia de un accidente de avión que en 1985 hizo que un traficante de drogas perdiese el gran alijo cocaína que transportaba... y parte del mismo acabó siendo ingerido por un enorme oso negro. Una trama rocambolesca, pero real ya que el filme que protagonizan Keri Russell, Christian Convery, Ray Liotta, Margo Martindale, Alden Ehrenreich, Brooklynn Prince y Kristofer Hivju está basado en un suceso que sí tuvo lugar.
En 1985, el exdetective de narcóticos Andrew Thornton (interpretado en la película por Matthew Rhys) transportó más de 300 kilos de cocaína desde Colombia a Estados Unidos en avión. Cuando creyó escuchar en la radio que los agentes federales le perseguían, Thornton arrojó las bolsas llenas de cocaína y saltó en paracaídas, aunque murió y posteriormente la policía encontró su cuerpo en Tennessee. A la luz de esta alocada historia, Banks confesó a USA Today que eliminó algunos detalles "que eran demasiado salvajes incluso para esta película".
Las bolsas llenas de droga cayeron en un parque nacional de Georgia y un oso las destrozó. Pero, a diferencia de la versión cinematográfica, el animal nunca mató a nadie: sus restos fueron encontrados después de morir de una sobredosis. El oso fue disecado y está expuesto en el Kentucky Fun Mall.
Pero en el filme, en lugar de morir tras ingerir la cocaina, el oso enajenado busca más droga y aterroriza a una madre soltera (Keri Russell), dos niños de 12 años (Brooklynn Prince y Christian Convery), un par de criminales (O'Shea Jackson Jr. y Alden Ehrenreich), una guardabosques (Margo Martindale) y un capo de la droga encarnado por Ray Liotta, actor que falleció en 2022.
UN OSO CGI, UN CASO REAL
USA Today revela que el oso que aparece en la película fue realizado mediante efectos especiales. "Todos los actores tenían que confiar en que el oso fuera real. Simplemente fue un acto de fe total", expuso Banks. Durante el rodaje, el especialista Allan Henry usó un gran traje de espuma y dio vida al oso, de manera que los actores pudieran interactuar con él y quedara más real. Henry estudió videos de movimientos de osos para ciertas secuencias, mientras que Banks investigó para representar mejor sus comportamientos.
Además, Banks reveló que "todos estaban un poco preocupados" por una escena ficticia en la que unos niños encuentran un kilo de cocaína en el bosque, intentan comer un poco y luego lo escupen. La toma llegó al montaje final y, según Banks, por una buena razón. "Retrata la pérdida de la inocencia de un niño de 12 años y su verdadera curiosidad por las cosas de los adultos a esa edad", esgrimió.
