MADRID, 24 Oct. (CulturaOcio) -
Black Adam ya está en los cines. Y con su llegada al DCEU no son pocos los fans que se han adentrado en los orígenes y la procedencia mística del personaje encarnado por Dwayne Johnson. Y esa es precisamente la razón de que se pregunten qué es el Eternium y la Corona de Sabacc, dos elementos de inconmensurable poder estrechamente ligados al pasado del antihéroe y a sus excepcionales habilidades que son clave en la película dirigida por Jaume Collet-Serra.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
El pasado de Black Adam es tan oscuro como el nombre del que hace gala. Y aunque esto no lo convierte necesariamente en un héroe, tampoco en un villano. Sin embargo, al igual que el antihéroe de Johnson fue escogido por unos poderosos magos que le imbuyeron con el poder de los dioses egipcios que le otorgan sus poderes, el filme cuenta con un adversario formidable ligado a sus orígenes y al que debe hacer frente: Sabacc.
Se trata de un hombre que, encarnado en la película por Marwan Kenzari, fue seducido por los seis demonios más grandes del Infierno para convertirse en su campeón. Y es que, si los dioses tienen su guerrero y paladín... los señores del averno también quieren el suyo. Y sus descomunales e infernales poderes se encuentran ligados a la legendaria Corona de Sabacc, un antiguo artefacto que solo podía forjarse en Kahndaq, el hogar natal de Teth-Adam, pero, ¿Qué es y cómo funcionan sus demoníacos dones?
Desde los albores de la civilización, el Consejo de Magos prometió cumplir su propósito: proteger a la humanidad contra la tiranía y la opresión a través de un campeón al que entregarían los poderes de los dioses y de los antiguos héroes. Y cada uno de estos firmes defensores de la luz y la justicia cuenta en cada fibra de su ser con la sabiduría de Salomón, la extraordinaria fuerza de Hércules, la resistencia de Atlas, el poder de Zeus, el coraje de Aquiles y la velocidad de Mercurio. Se trata, efectivamente y sí, de los mismos poderes con los que Billy Batson se transforma en Shazam y a Teth-Adam en Black Adam.
S.A.B.A.C.C.
De tal manera que ante este hecho y completamente enfurecidos por ello, los seis demonios más poderosos del Infierno, decidieron crear a su propio guerrero. Y para ello necesitaban que un humano forjase la Corona de Sabacc, un acrónimo de las seis iniciales de este sexteto de seres del inframundo: Satanás, Aym, Belial, Beelzebub, Asmodeus y Crateis, cuya función además es la de servir como llave de los Reinos del Infierno.
Claro que, para abrir las puertas del averno, los escogidos deben morir sosteniendo la corona. En la película dicha corona se forjó hace 5.000 años, cuando Kanhdaq era gobernada por un rey hambriento de poder que esclavizó a su propia gente para extraer de sus tierras el Eternium. Un extraordinario metal que solo podía encontrarse allí, que se empleaba para artefactos mágicos.
Y cuando el tirano hubo amasado la cantidad de Eternium que necesitaba, forjó la Corona de Sabacc, grabando en ella cómo utilizarla, dando a entender que solo la muerte puede conducir a la vida y para encontrarse con los señores demoníacos, debe primero sacrificar su carne mortal y sumergirse en el infierno. Sin embargo, para mostrar que son dignos, primero deben llegar a la Roca de la Finalidad, un foco de gran poder necesario para llevar a cabo el ritual para convertirse en sus campeones.
Consumido por la ira y con sed de sangre después de que su hijo muriese por orden del tirano que gobernaba a las buenas gentes de Khandaq, Teth-Adam, imbuido por el poder de los dioses egipcios, mata a sangre fría al regente momentos antes de que pueda ponerse la corona. Sin embargo, con sus poderes completamente fuera de control, sus actos casi destruyen la ciudad que era su hogar. Fue entonces cuando el Consejo de Magos, al ver que Adam era indigno de sus poderes, lo atrapó en una prisión mística y ocultaron la Corona de Sabacc cerca de donde lo apresaron.
Una decisión de la que, por el momento, se desconoce si fue con la intención de albergar allí a dos elementos de inconmensurable poder, o con la esperanza de que algún día, Black Adam, fuera el campeón que una vez creyeron podría ser. Claro que también cabe la posibilidad de que planearan, que fuera el último recurso en caso de que se liberase el temible poder que confiere la Corona de Sabacc si alguien se hiciera con ella.
