Actualizado: viernes, 28 octubre 2016 10:18

MADRID, 28 Oct. (CulturaOcio) -

Los Simpson es una serie capaz de adivinar el futuro. Su equipo de guionistas son una suerte de Oráculo de Delfos al que probablemente acudirán año tras año personas preguntando cual será el próximo número de la lotería premiado. Pero esta broma emitida hace años en televisión y convertida en realidad ahora, se lleva la palma.

En un episodio de la familia amarilla, Barney se convierte en un artista conceptual y comienza a frecuentar la compañía de otros intelectuales... como Yoko Ono, que no tarda en acercarse a su alargada y popular sombra como hiciera con John Lennon. En una escena en el bar de Moe, Ono pide para beber "una única pluma flotando sobre perfume en el interior de un sombrero de hombre". Lo normal cuando quedas para ver la Champions con amigos.

Años más tarde, Ono ha apadrinado una exhibición artística en Reykjavik (Islandia) y en ella, el artista local Ragnar Kjartansson se ha puesto el disfraz de trol antes de Halloween presentando como obra una sola pluma flotando sobre perfume dentro de un sombrero masculino.

Si le preguntan, el islandés dirá que se estaba acogiendo a la petición de Ono de "sustituir la vasija por el agua para darle a la gente algo para sanar sus mentes", según informa IceNews, cuando preparaban la exposición.

LA BOLA DE CRISTAL DE LOS SIMPSON

Dentro de los inquietantes antecedentes de la familia amarilla encontramos algunos espeluznantes ejemplos: en 2000 predijeron una futura presidencia de Donald Trump, la muerte de Arnold Palmer este mismo año, la invención de un aparato que traduce los sonidos de los bebés, el descubrimiento de un pez con tres ojos, el uso cotidiano de la videollamada, la creación de robots bibliotecarios, el arresto del presidente de la FIFA un año antes de producirse... y recientemente se cumplió su pronóstico sobre el ganador del premio Nobel de Economía.

Todo un carrusel de predicciones que augura un futuro prometedor a los ingeniosos guionistas como echadores de cartas en tempestivas emisiones televisivas. Deberemos estar atentos a cada fotograma de los nuevos episodios, porque será lo más cerca al futuro que vamos a estar en el presente.