MADRID, 26 Feb. (CulturaOcio)
Madonna se ha convertido involuntariamente en la protagonista absoluta de la edición de este año de los Brit Awards, los premios más importantes de la industria musical británica.
Y decimos involuntariamente porque ella hubiera preferido pasar a la posteridad por sus creaciones musicales y no por despeñarse desde el escenario en plena actuación, ante los asustados y asombrados ojos de los que pudieron vivir la aparatosa caída en todo su doloroso esplendor.
La diva del pop estaba interpretando su single Living for Love, primer adelanto de su esperado disco Rebel Heart, que llegará a las tiendas de todo el mundo la semana próxima, cuando su capa se enganchó y terminó tirada por los suelos. A duras penas ella se levanta, contiene el bochorno y prosigue con la actuación. La tensión y la incertidumbre se palpan.
“Armani me enganchó. Mi preciosa capa estaba demasiado ajustada. Pero nada puede pararme y el amor realmente me elevó. Gracias por vuestros buenos deseos. ¡Estoy bien!”, ha declarado Madonna, para tranquilidad de sus fans.
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