Brian May: "Sufrí un ataque al corazón, estuve muy cerca de la muerte"

Brian May, guitarrista de Queen, se retracta de sus palabras y pide disculpas a sus seguidores después de defender públicamente al director de Bohemian Rhapsody, Bryan Singer, acusado por varios menores de abuso sexual
Brian May, guitarrista de Queen, se retracta de sus palabras y pide disculpas a sus seguidores después de defender públicamente al director de Bohemian Rhapsody, Bryan Singer, acusado por varios menores de abuso sexual - GETTY - Archivo
Actualizado: lunes, 25 mayo 2020 11:54

MADRID, 25 May. (CulturaOcio) -

El guitarrista de Queen, Brian May, ha revelado que sufrió un "pequeño ataque al corazón" y estuvo "muy cerca de la muerte" tras el accidente de jardinería que sufrió hace un par de semanas.

Y es que dicho accidente, en el que el músico inglés de 72 años se destrozó los gluteos, dañó también sus nervios y, partir de esta dolencia, todo se complicó con los resultados de las siguientes pruebas.

Ahora May ha contado en Instagram que pasó una "agonía" por las heridas, y ha explicado que, de vuelta en casa tras su primera hospitalización, sufrió unos dolores que eran como si le pusieran "un destornillador en la espalda", y que resultaron ser un nervio ciático comprimido.

Aunque inicialmente pensó que el intenso dolor provenía de los glúteos, terminó regresando al hospital y los médicos encontraron que tenía tenía "tres arterias congestionadas". Esto ha llevado al músico a asegurar que estuvo "muy cerca de la muerte".

"En medio de toda la saga de la dolorosa parte trasera, sufrí un pequeño ataque al corazón. Digo pequeño, no es algo que me haya hecho daño", ha desvelado en su mensaje en Instagram, en el que explica que fue llevado al hospital al sufrir intensos dolores en el pecho durante 40 minutos.

Por consejo médico, Brian May se sometió a una operación en la que le colocaron tres stents para que la sangre pudiera circular nuevamente por su cuerpo.

"No tenía ni idea de que estaba en riesgo, podría haber muerto", ha remarcado, aseagurando que nunca antes habían encontrado nada en sus revisiones cardíacas.

Y ha añadido: "Es increíble lo que el dolor real te hace. Siempre he tenido tolerancia a los niveles de dolor, como no recibir pinchazos de novocaína en el dentista o lo que sea, pero este dolor nervioso que llegó a habitar mi cuerpo hace unas tres semanas, no, no era una cosa de glúteos después de todo. Y paralizó mi cerebro".

Así, ha explicado May que el dolor se apoderó de su personalidad, llegando al punto de sentir que estaba "luchando por volver" a su cuerpo. "Y me rendí y tomé potentes analgésicos. Estaba en un mundo de pesadilla", ha apostillado.