MADRID, 30 Oct. (CulturaOcio) -
Stranger Things ha regresado a Netflix a lo grande. La serie de ciencia ficción de los hermanos Duffer trae de vuelta a Eleven y compañía a la pequeña pantalla con motivo de las celebracions de Halloween. Sin embargo, la escena inicial del primer capítulo ha desconcertado a muchos fans.
((ATENCIÓN: ESTA NOTICIA CONTIENE SPOILERS))
El capítulo 2x01, titulado 'Madmax', arranca en Pittsburgh, una gran ciudad que dista bastante de la tranquilidad de Hawkins (Indiana). En ella un grupo de delincuentes que cubren sus caras con grotescas máscaras atracan un banco y escapan en una furgoneta. En un momento de la trepidante persecución, cuando parece que los ladrones van a ser capturados por la policía, uno de los miembros de la banda -que parece ser el jefe- le pide a otro de los ellos que haga "algo".
Y ese algo no es otra cosa que sembrar el pánico en el policía el primero de los coches patrulla que les persiguen. La joven, de tez oscura, cierra los ojos y despliega sus poderes (telequinesis) para hacer creer al agente que un puente se ha derrumbado. El policía frena en seco su coche haciendo que el resto de las fuerzas del orden no puedan continuar la persecución.
El personaje en cuestión es Kali (Linnea Berthelsen), que tras mostrar de lo que es capaz, sangra de la nariz como Eleven y muestra el tatuaje de su brazo: el número 8. Tal como revelaron los hermanos Duffer, en los nuevos capítulos tratarían de "extender la credibilidad" con tramas más allá de Hawkins. Para deleite de los fans, este nuevo personaje aparece en los siguientes capítulos explicando sus orígenes.
Todo apunta a que Kali fue otra de las víctimas de los experimentos realizados por el Laboratorio Nacional de Hawkins en el marco del programa del doctor Brenner (Matthew Modine) en el que se emplearon fármacos psicotrópicos para investigar el control mental. ¿Veremos a un grupo de jóvenes con poderes al estilo de los 'mutantes' de X-Men de Marvel en próximos capítulos de Stranger Things?
